El la estaba esperando, con una flor amarilla.
Ella lo estaba soñando, con la luz en su pupila.
Y el amarillo del sol iluminaba la esquina, lo sentia tan cercano, lo sentia desde niña.
con sus flores amarillas.
No te apures, no detengas, el instante del encuentro
esta dicho que es un hecho no la pierdas no hay derecho
no te olvides que la vida casi nunca esta dormida...
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